El festejo del histórico delantero brasileño se dividió en dos partes: por la tarde hubo una pool party en las piletas del complejo, donde se pudo ver a las grandes estrellas del fútbol mundial disfrutando del sol junto a hermosas mujeres. Por la noche, la celebración continuó en el boliche Surrender, en donde no faltaron tragos y bailes sensuales.
Messi estuvo acompañado gran parte de la noche por una mujer rubia. Él con trago en mano disfrutó de un baile erótico y puso su mirada en el provocativo escote de su acompañante.
El delantero del Bacelona disfrutó la noche hasta que se dio cuenta de que un fotógrafo ya tenía esas imágenes. A partir de allí quiso pasar inadvertido, pero ya era tarde.
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